LA SIEMPRE DOBLE MORAL DE LOS GRINGOS

A propósito del caso Assange 

A propósito del acoso a que viene siendo sometido el periodista Julián Assange, para ser extraditado a Suecia, y por ahí derecho a los Estados Unidos, me permito hacer un cortísimo recuento del extenso listado de algunos terroristas, sicarios, torturadores, asesinos, mafiosos, vulgares delincuentes, crápulas, asilados en el autoproclamado país de la democracia: Estados Unidos.  

Rolando Masferrer, terrorista,  líder de la organización paramilitar y criminal conocida  como los  "Tigres de Masferrer", involucrado en un plan para asesinar al entonces presidente de Cuba Fidel Castro  en 1966, tal como lo confirma el informe  FBI NY (2-623), emitido el   06/11/67, y asesinado en Miami por sus mismos compinches.

Armando Valladares, integrante del cuerpo policial del dictador Fulgencio Batita, pasó 22 años en cárceles de Cuba, cumpliendo sentencia por la colocación de bombas tras el triunfo de la Revolución.

Alejandro Melgar, el cabecilla de la conspiración magnicida de Santa Cruz, que financió la creación de un comando terrorista conformado con mercenarios croatas que intentó asesinar al presidente Evo Morales.

Gonzalo Sánchez de Losada, el ex mandatario boliviano responsable de la masacre de la Guerra del Gas que provocó más de 60 muertos y medio millar de heridos – junto con varios de sus ex ministros implicados en la matanza.

Joaquim Chaffardet, miembro de la Disip venezolana, cómplice de Luis Posada Carriles, en los años 70, en la tortura, la desaparición, el asesinato de cientos de jóvenes revolucionarios de Venezuela.

José Antonio Colina, militar venezolano traidor, reclamado por atentados con explosivo C4 en representaciones diplomáticas de Caracas, junto con su cómplice Raúl Díaz Peña que se exhiben en asambleas públicas con la congresista Ileana Ros-Lehtinen.

Patricia Poleo, cómplice del asesinato del fiscal venezolano Danilo Anderson, que calumnia desde Miami el Gobierno bolivariano de Venezuela y sus dirigentes.

El ex agente DISIP Johan Peña que colocó la bomba que pulverizó a Anderson en su vehículo y su cómplice José Guevara.

Carlos Vides Casanova, el ex jefe de la Guardia Nacional de El Salvador, torturador, participó en el asesinato de monjas norteamericanas.

Roberto Guillermo Bravo, el oficial argentino, participó en la masacre de Trelew que les costó la vida a 16 jóvenes revolucionarios que remató.

Jaime Lusinchi, el ex presidente venezolano, reclamado por corrupción y su responsabilidad en la masacre de Yumare,

Jaime García Covarrubias, un ex alto oficial represor del dictador chileno Augusto Pinochet, acusado de torturas y asesinatos, profesor en una academia del Pentágono, en Washington.

Inocente Orlando Montano, este ex coronel salvadoreño, cómplice del asesinato de los sacerdotes Jesuitas.

Ray David Charles, un ex jefe de misión militar en EE.UU de la dictadura criminal de Pinochet.

Jamil Mahuad, el ex presidente ecuatoriano responsable por la muerte de decenas de sus compatriotas.

Cesar Matamoros, el terrorista panameño cómplice de Posada Carriles hoy discretamente radicado en Miami.

- El ex dictador peruano Francisco Morales, reclamado por Argentina acusado por secuestros.

Carlos Yacamán, asesino del ex ministro hondureño de Vivienda de la administración Zelaya, Roland Valenzuela, por haber identificado una colaboradora de la CIA involucrada en el golpe de estado, Jacqueline Foglia Sandoval que también se encuentra en Miami.

Michael Townley, Guillermo Novo, José Dionisio Suárez y Virgilio Paz, los asesinos del ex canciller chileno Letelier.

Luis Posada Carriles, responsable de la muerte de 76 personas, victimas de la explosión del vuelo 455 de Cubana de Aviación. 

Con este prontuario, ¿tiene los Estados Unidos y los demás países que le sirven de portavoces y que de paso se hacen los de la vista ciega ante sus fechorías, como Gran Bretaña,  la autoridad moral para presionar la extradición de Julián Assange?  .  .  . ¡Por Dios!