LOS PATALEOS DEL "SEÑOR" DEL UBERRIMO
Señor Emperadorcito, recientemente y en una de sus innumerables salidas en falso, usted afirmó:
"muchos de mis compañeros no tienen garantías y la persecución sobre ellos también amenaza sus vidas", y argumentó que las imputaciones contra ellos las hacen testigos "con comprobada capacidad de mentir y con claros indicios de estar al servicio de los criminales"
A raíz de tan sorprendente afirmación, sorprendente por venir de quien viene, permítame hacerle una cuantas preguntas, esperando eso si que por fin, y al menos una vez en su monárquica vida, no termine respondiendo por lo que nunca se la ha preguntado, como es su patológica costumbre.
¿Acaso la justica que usted hoy cuestiona, no es imagen y semejanza de su huevito llamado “seguridad democrática”?
¿Está usted diciendo que la justicia fue buena cuando estaba al servicio de sus conductas de hacendado de pueblo?
¿No fue con esa misma justicia, que bajo su mandato se asesinó a cientos de jóvenes, bajo el eufemismo de falsos positivos?
¿Pide para usted y su sequito las mismas garantías que tuvieron bajo su administración, los cientos de sindicalistas, defensores de dd.hh. y demás luchadores populares, que hoy en día se están pudriendo en la cárcel, producto de viles montajes, cuando no en los cementerios o alguna fosa común como por ejemplo la Macarena?
¿Hablando de imputaciones, por ejemplo, la que usted hizo contra el ex magistrado Iván Velázquez y la Corte Suprema de Justica, supongo que se sirvió de una persona muy “honorable” y que nunca en su vida ha dicho mentiras como Jorge Orlando Moncada alias “Tasmania”?
¿Debo imaginar que los reclutas informantes que usted impulsó para acusar de guerrillero a cuanto sindicalista, obrero, afro-descendiente, indígena, campesino etc se le atravesara en su camino, que la red que bajo su gobierno se intento montar con el “señor” Ernesto Yamhure en Suecia para perseguir a la oposición, que lo sapos de la red informantes en Universidades, entre otros, fueron actos de grandeza a favor de la patria, y no de su prepotencia reaccionaria, y que jamás en sus vidas, tales integrantes montaron acusaciones amañadas, por lo que entonces no hay que dudar de su probidad?
¿Los congresistas y senadores de su corte y que fue quienes lo pusieron a usted en el Palacio de Nari en dos ocasiones, jamás se aliaron con criminales como Carlos Castaño, “Don Berna”, “Mancuso”, “Mono Leche”, “El Alemán”, etc, para el logro de sus pérfidos propósitos?
¿Pretende hacerle creer a todo el mundo que el único modelo de justica valido y por tanto digna de imitar, fue la ejecutada bajo su gobierno a través de su “seguridad democrática” (¿inseguridad teocrática?), la cual entre otras aberraciones, postro al DAS a su servicio para que chuzara a la oposición nacional e internacional?
¿La justicia fue buena cuando se señalo, persiguió, acosó, encarceló y asesinó miles de hombre y mujeres militantes de la oposición o a personas que sencillamente expresaban el descuerdo con sus políticas, pero ahora resulta que es lo peor del mundo, porque se le empieza a cerrar el espacio a usted y su sequito?
¿Asesorar a sus súbditos para que evadan las justicia mediante el asilo, hace parte de su estrategia para lograr que todos sus desmanes queden en la impunidad?
En resumidas cuentas, ¿No será que eso que usted ha dicho, y lo que va a decir y a hacer, son meros pataleos de ahogado, propios de quien utilizó la justicia para sus propios fines y que ahora siente pasos de animal grande?
Definitivamente, ¡Qué descaro! el suyo.
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